3 de diciembre de 2024 (11:46 hrs).-La disputa entre el multimillonario empresario Ricardo Salinas Pliego y el periodista Álvaro Delgado Gómez escaló en redes sociales a raíz de una deuda fiscal millonaria que el Servicio de Administración Tributaria (SAT) reclama al empresario. Este enfrentamiento también expuso la conexión entre Salinas y las decisiones judiciales que favorecieron la dilación en la resolución de su caso fiscal.
El origen de la controversia
El periodista Álvaro Delgado Gómez publicó en la red social X un mensaje donde cuestionaba al ministro Luis María Aguilar Morales, a quien acusó de ser un aliado de Salinas Pliego y otros empresarios influyentes. Delgado destacó el papel del ministro en la dilación de un caso fiscal relacionado con el empresario, mencionando:
“Un mandadero de Ricardo Salinas Pliego y otros oligarcas.
En respuesta, Salinas Pliego lanzó una serie de comentarios ofensivos dirigidos a Delgado, acusándolo de envidia y de depender de favores económicos para subsistir. Las respuestas de Delgado fueron contundentes, señalando que Salinas estaba “furioso porque pagará lo que debe” y refiriéndose a las acusaciones de corrupción que pesan sobre el empresario, sustentadas en el libro “Mis años en Elektra”, escrito por su padre, Hugo Salinas Price.
La megadeuda fiscal de Salinas Pliego
Durante una conferencia matutina, el Jefe del SAT, Antonio Martínez Dagnino, confirmó que las empresas de Ricardo Salinas Pliego adeudan al SAT 63 mil millones de pesos. Este monto se desglosa en:
- 53 mil millones de pesos derivados de juicios fiscales iniciados en años anteriores.
- 10 mil millones de pesos generados por créditos fiscales emitidos en la actual administración.
El SAT explicó que la cifra se originó en auditorías realizadas entre 2008 y 2018, cuando el monto inicial era de 38 mil millones de pesos. Tras ajustes por inflación y recargos, el monto creció significativamente.
La implicación del ministro Luis María Aguilar
El caso ganó notoriedad cuando el presidente Andrés Manuel López Obrador denunció que Luis María Aguilar, entonces ministro de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), archivó un expediente relacionado con una deuda fiscal de 25 mil millones de pesos vinculada a Salinas Pliego. Según AMLO, el expediente permaneció sin resolver durante 10 meses, lo que permitió al empresario evitar el pago.
Esta denuncia generó un debate sobre la necesidad de reformar el Poder Judicial para garantizar la imparcialidad de los jueces y magistrados. López Obrador argumentó que los ministros son influenciados por los poderosos, lo que refuerza la urgencia de permitir que el pueblo participe en su elección.
Respuesta judicial
Ante la presión mediática y política, la SCJN ordenó a Aguilar devolver el expediente a los tribunales para su resolución. Este paso fue considerado por López Obrador como un avance hacia la transparencia y la rendición de cuentas en el sistema judicial.
Puntos de la discusión entre Ricardo Salinas Pliego y Álvaro Delgado Gómez:
- Crítica inicial de Álvaro Delgado:
- Delgado acusó al ministro Luis María Aguilar Morales de proteger los intereses de Ricardo Salinas Pliego al retrasar la resolución de un caso fiscal.
- En su mensaje, lo calificó como “un mandadero de Ricardo Salinas Pliego y otros oligarcas”.
- Respuesta de Salinas Pliego:
- Salinas lanzó comentarios ofensivos contra Delgado, acusándolo de envidia y de ser un “perro muerto de hambre”.
- Afirmó que las críticas eran motivadas por el resentimiento hacia su éxito.
- Contrarrespuesta de Delgado:
- Delgado señaló que Salinas estaba “furioso porque pagará lo que debe”.
- Lo acusó de ser un ladrón, mencionando el libro escrito por el padre de Salinas, Hugo Salinas Price, donde se relatan presuntas prácticas cuestionables.
- Insultos personales de Salinas:
- Salinas continuó atacando a Delgado con comentarios despectivos sobre su apariencia física, su situación económica y su familia.
- Afirmó que Delgado vivía obsesionado con él y lo calificó como un “muerto de hambre”.
- Reafirmación de Delgado:
- Delgado mantuvo su postura, insistiendo en que Salinas debía pagar sus deudas fiscales.
- Lo llamó “ladrón” y sostuvo que las prácticas de evasión fiscal estaban documentadas en el libro de su padre.
- Tono ofensivo de Salinas:
- Salinas culminó con más ataques personales, acusando a Delgado de envidia y pobreza, mientras afirmaba que su éxito era inalcanzable para él y sus descendientes.
- Cierre de Delgado:
- Delgado finalizó con una frase lapidaria: “Siga ladrando, Salinas, siga ladrando”.
