Por: Enrique Méndez Álvarez
Más que dirigir estrategias y coordinar el nuevo esquema de coordinación estatal en la lucha contra el crimen organizado en Baja California, el general LAURENO CARRILLO, debe sumarse a la petición empresarial y de la ciudadanía, para que OMAR GARCÍA HARFUCH, haga acto de presencia en esta región y ejerza contundentemente las acciones que pongan alto, a los asesinatos, vuelos de drones con explosivos, extorciones, incendio de vehículos, negocios y casas habitación, cobro de piso al comercio, y desapariciones de personas.
Y es que el tema ese del “esquema estatal contra el crimen”, ya tiene meses que fue anunciado, pero a los cárteles del narcotráfico que luchan sin escrúpulos por el control de su mortal negocio, simplemente se burlan de la estrategia encargada al secretario de Seguridad Ciudadana del Estado.
La llegada de GARCÍA HARFUCH, no debe ser como la un super héroe con guantes, capa, espada justiciera y botas hasta las rodillas, pues la presencia que exigen los bajacalifornianos, es que venga a la entidad y traiga un contingente de fuerzas federales que capturen a los cabecillas del narcotráfico y a los centenares de operadores de células y pandillas que en una lucha encarnizada matan rivales y envenenan día y noche a consumidores con todo tipo de droga.
Existe constancia de que, en otras entidades, el trabajo del Gabinete de Seguridad al mando de OMAR CARCÍA, ha sido determinante para el encarcelamiento y extradición de cabecillas de organizaciones delictivas.
Aquí en Baja California también se han registrado importantes aprehensiones, de igual forma que se confisca droga que dejó de circular en la entidad, o que tenía como destino el consumo en el vecino país.
Sin embargo, los considerados como objetivos prioritarios, por el gobierno de Estados Unidos y autoridades mexicanas, esos siguen prófugos disponiendo más asesinatos e imponiéndose ante la autoridad.
Sabido es que, tanto en el Ejército, como en la Fiscalía Federal, y corporaciones locales, existen mapas con la ubicación exacta e identidad de quienes operan el narcomenudeo en Baja California, lo que resulta increíble que, pese a esto, ese mal no sea extirpado.
Esta semana llegó el general VICENTE PÉREZ LÓPEZ, como titular de la Comandancia de la II Región Militar, de acuerdo a lo informado por la gobernadora MARINA DEL PILAR ÁVILA OLMEDA, lo que da un halito de esperanza en la lucha contra la violencia que se registra en Baja California.
A la llegada del militar, la titular del Poder Ejecutivo, expresó su confianza en se siga avanzando con paso firme en la misión de garantizar la paz y seguridad de las familias bajacalifornianas.
A los cabecillas los persigue la policía antinarcóticos en ambos lados de la frontera, pero como si fueran fantasmas, no los pueden atrapar.
Se sabe que los quieren en prisión, para cerrar investigaciones que conduzcan al paradero de los que, desde las diversas instancias de gobierno, cobran millonarias cantidades de dinero para permitirles actuar impunemente.
Pero los límites de los delitos que se cometen a toda hora ya tienen harta a la comunidad, y pudiera decirse que especialmente a un sector inversor que con la aplicación de su capital sostiene fuentes de trabajo que permiten el desarrollo regional.
Pero estos hombres y mujeres de negocios están hartos de la amenaza y acciones que se ciernen sobre ellos, por esto, el clamor de que el mandamás de la seguridad en México, de la orden para en que Baja California retorne la tranquilidad y que los criminales sean entregados a la justicia.
Solo para muy Chichos
He intentado hacer lo correcto
Grover Cleveland
Últimas palabras del presidente estadounidense
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